Pastel de limón con labneh y agua de azahar
Hay pasteles que simplemente no puedo rechazar. Con o sin dieta: la tarta de limón siempre está buena. Y si la tarta está muy bien hecha y es muy jugosa, se devora más de un trozo rápidamente. ¿Qué hace que mi tarta esté especialmente húmeda? Probablemente ya lo habrás notado en el título: esta tarta de limón lleva una buena porción de labneh fresco. Dentro de un momento le explicaré por qué este pastel también me recuerda a la limonada casera.
Horneado con labneh – para que quede bien jugoso.
Aunque a mí me sigue gustando más el labneh al estilo clásico, con un chorrito de aceite de oliva, una pizca de za’atar y pan de pita fresco, ¡también se puede hornear fantásticamente con él!
Con labneh en la masa, te ahorras la pizca de sal en el bizcocho y además le añades una nota ácida fresca encantadora. El hecho de que el labneh se elabore a partir de yogur rico en grasas no perjudicará en absoluto a un bizcocho jugoso 😉.
El Labneh añade otra nota fresca al pastel de limón y lo hace aún más jugoso por su contenido en grasa. Pero, ¿se nota realmente el sabor del queso crema? No puedo decírtelo con exactitud.
Me trago los trozos de tarta por la garganta como un gavilán hambriento y luego siseo pidiendo más… bromas aparte: No creo que se pueda saborear directamente. Pero sí indirectamente a través de la jugosidad esponjosa del pastel de limón.
Tarta de limón que sabe a limonada
Cuando elaboré la receta de esta tarta de limón, tenía en la lengua el sabor de la limonada casera de mi madre. Me encanta el encantador sabor fresco de la limonada y lo rápido que se prepara.
Esto también se aplica a la tarta. Al igual que en la limonada, aquí los tonos principales son el limón, el dulce y el agua de azahar. Así que el clásico bizcocho de limón siempre recibe en mi casa una pequeña “ducha de limonada”, que vuelve a hacer el bizcocho mucho más jugoso y le da un aroma súper especial. Súper refrescante y sigue siendo un “pequeño” pecado calórico. Diviértete horneando y ¡buen provecho!
Receta de pastel de limón jugoso con labneh
Equipment
- Pincel para pastelería
Ingredientes
Masa
- 200 g Mantequilla temperatura de la habitación
- 150 g Azúcar
- 4 Huevos
- 2 Limones (rallados) Orgánico
- 1 TBSP. Zumo de limón
- 100 g Labneh según la receta
- 230 g Harina
- 50 g almendras molidas
- 4 TSP Polvo de hornear
Salsa de limón
- 120 ml Zumo de limón corresponde a aproximadamente 1 – 1,5 limones grandes
- 60 g Azúcar
- 4 TSP Agua de azahar
Casting
- 120 g Azúcar glasé
- 1 TSP Agua de azahar
- 3 TSP Zumo de limón
- 3 TL Agua
Para la guarnición
- 20 g pistachos picados
Zubereitung
Masa
- Precalentar el horno a 170 °C.
- Lavar bien los limones y rallar la cáscara. A continuación, exprimir el jugo (se necesitará más tarde).
- Mezclar la harina con la levadura en polvo y las almendras molidas.
- Batir el azúcar con la mantequilla hasta que esté cremoso.
- Añadir los huevos uno a uno y seguir mezclando.
- Añadir el labneh, el zumo de limón y la ralladura de limón y seguir batiendo.
- Añadir poco a poco la mezcla de harina y mezclar brevemente para formar una masa suave.
- Engrasar el molde, verter la masa y alisarla.
- Hornear el pastel de limón durante unos 45 minutos en el horno precalentado. Compruebe la masa al final: Introduce un palo/cuchillo de madera en el pastel y comprueba si se pega alguna masa al sacarlo. Si la masa cruda se pega, deje que se hornee unos minutos más.
Salsa de limón
- Mezclar el zumo de limón con el azúcar y el agua de azahar hasta que el azúcar se haya disuelto.
- Mientras el pastel está todavía caliente, haga muchos agujeros pequeños con un palillo y pinte la salsa de limón sobre el pastel hasta que se absorba toda.
- Deje que el pastel se enfríe completamente y luego sáquelo del molde.
Casting
- Mezclar el azúcar glas con el resto de los ingredientes hasta que esté cremoso, pero todavía un poco contado.
- Verter el glaseado sobre el pastel y extenderlo.
- Opcionalmente, adorne con pistachos picados.
Notas
Nährwerte
No deje de probar la tarta de queso con za’atar, los bollos de tahini, el jugoso pastel de dátiles, la babka de chocolate o la tarta de chocolate con crema de pistacho.